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GASTO MÁS DE LO QUE GANO

GASTO MÁS DE LO QUE GANO

By SINERGIA & EQUILIBRIO

En estos tiempos en que la economía del hogar suele estar deprimida, por la mala gestión de los gobiernos, la falta de empleos, el cierre de oportunidades para pequeños empresarios, la inflación se come lo que ganas o simplemente gastas más de lo que ganas; es común ver personas con crisis de salud física y mental, endeudándose o dejando de cubrir sus necesidades básicas por cubrir otras.

Últimamente le achacas los problemas económicos a condiciones externas en vez de revisar ¿que estás haciendo?, la forma en que ganas el dinero o en cómo lo inviertes; si tienes pérdidas o fugas y mucho menos estudiar las inversiones que haces. ¿Te mantienes en una crisis?

 

Aquí se juntan varios temas, unos relacionados con cuánto y cómo lo ganas y otros relativos a cómo lo gastas. Hablemos de lo que entra a tu casa primeramente. En este punto será muy valioso evaluar si la forma en que ganas el dinero te hace sentir cómodo, seguro, alegre y entusiasmado o triste, preocupado y desmotivado. Este tema es toda una revisión interna que va más allá del cuánto ganas, sino contemplar la forma en que percibes este proceso. Es posible que el trabajo sea una  carga y te esté restando energía, por lo cual lo que te motiva se basa en el dinero que percibes a cambio de tu esfuerzo, si es así revisa inmediatamente tu actitud y aprende a valorar lo que recibes o vives en el día a día como por ejemplo: las relaciones con tus compañeros, los clientes, la oportunidad de aprendizaje de conocimientos, el mantenerte activ@ y estar en movimiento diariamente. La solución no siempre se basa en cambiar de empleo, ya que la forma en que lo percibes irá contigo a tu nuevo empleo, es por ello que te recomiendo hacer tu evaluación interior, agradeciendo lo que tienes en vez de quejarte por lo que no tienes.

 

Referente a las entradas de dinero también valdría la pena preguntar si estás bien en las relaciones con tu padre, o simplemente el concepto que tienes de él, lo cual genera una energía poderosa para poder avivar la entrada de dinero a tus bolsillos.

 

LOS EGOS DE LA TERCERA DIMENSIÓN

 

Recordemos que en la tercera dimensión donde estamos viviendo, se necesitan los recursos económicos para vivir, siendo éstos un elemento básico que tiene muchos matices, como la moneda, los alimentos, ropa y calzado, tecnología, entre otros. Se trata de ampliar el concepto del dinero a todo aquello que nos genere la satisfacción de una necesidad material, sin importar su costo o valor. Entonces podemos tener recursos, como vivir en casa de un familiar, sin necesidad de tener dinero en moneda; es así como ésta dimensión está llena de recursos a la vista de los humanos pero que lamentablemente no le damos valor, ya que se tiene el equívoco concepto de que la prosperidad depende del dinero que proviene del esfuerzo propio.

 

En ésta 3ra. Dimensión se encuentran en los humanos, los famosos EGOS, que nos hacen mantenernos en el carrusel de emociones y nos ayudan a acercarnos a experiencias de vidas de distintas índoles. Recordemos que según la fuente del Centro de Estudios Kardem en México conocemos 7 egos: Yo Quiero, Yo deseo, Yo Necesito, Yo razono, Yo siento, Yo pienso y Yo voluntad. Cada uno aparece en distintos momentos, pero muy especialmente en el tema económico podemos evidenciar el Yo Pienso y el Yo Razono, los cuales constantemente están evaluando si lo que haces es correcto, si podrías tener otra cosa o si está bien lo que haces, ocasionando dudas y bloqueos por lo cual el ego Yo Voluntad deja de actuar y se paraliza, haciendo que vivas en una constante  incertidumbre, alejado de tu parte espiritual y en medio del desastre económico y social que te rodea, es decir: dejas de actuar según tu voluntad divina y sabia.

 

Tocando el otro tema, de cómo gastas el dinero, se involucra los egos: Yo Necesito y el Yo quiero, haciendo que cada día intentes tener más posesiones, vivir un mejor estatus social, acumular dinero, vivir tomando decisiones desde la carencia y no desde la prosperidad natural del ser humano, rodeado de elementos naturales que Dios puso a tu disposición.  En este caso es bueno conectar con la abundancia y el poder del pensamiento positivo, ya que esto determina lo que ocurrirá en tu vida en el futuro cercano.

 

LA RELACIÓN DEL ESPACIO TIEMPO

 

Nos encontramos dentro de una esfera de espacio tiempo multidimensional, en el cual se proyectan los sucesos del pasado, presente y futuro, conectados desde la intención con que actúas a través del pensamiento, el cual genera situaciones que van girando en tu entorno áurico y con el tiempo se hacen realidad palpable en el presente, es sólo cuestión de horas, días o semanas para conectar el deseo, pensamiento y acción con la realización de los hechos; así que es oportuno comenzar a programar la intención o deseo positivo en todas las actividades que realizas.

Fuente: Libro «Un camino hacia tu alma gemela» por Arisbel Arreaza

En cuanto a la forma que inviertes el dinero, considerándote un ente co creador del futuro, os recomiendo retomar la pirámide de Maslow, quien habla de las necesidades del Ser humano (ver imagen), partiendo por cubrir las necesidades básicas que están en la base de la pirámide, para luego ir subiendo los escalones, pero sería desastroso para tu economía intentar cubrir aspectos relacionados a las necesidades de afiliación, como por ejemplo: salir a comer o compartir en un bar con amigos, sólo para estar en “buen estatus”; o pagar porque te laven el coche aunque no te alcance para el mercado de la semana, teniendo que recurrir a deudas y créditos que te amordazarán en un futuro no muy lejano; sin antes cubrir las necesidades fisiológicas de comida, vestimenta y descanso por ejemplo.

Fuente: wikipedia

 

Entonces, puedo recomendarte:

  • Revisar cómo ganas el dinero y cómo percibes el proceso.
  • Encuentra los aspectos positivos de tu trabajo actual. Vive, respira y genera paz y felicidad interior, agradeciendo a Dios por las oportunidades del día a día.
  • Ampliar tu concepto del dinero a todos los recursos que te rodean, sintiendo más prosperidad de la que se limita a la moneda.
  • Revisar tu relación con tu padre, dale un espacio en tu corazón, hónralo, para él también pudo ser difícil la historia que vivieron, no solamente tu como hijo estás herido. Sin juzgar, acepta y agradece por aceptar traerte a la vida junto a tu madre.
  • Anota y evalúa tus gastos, revisa si hay fugas de dinero innecesarias y reduce los lujos si no son momento de vivirlos. Todo tiene un momento, genéralo. Cubre primeramente tus necesidades básicas y luego las de seguridad, afiliación y reconocimiento para poder alcanzar la autorrealización de tus propias necesidades, según Maslow.
  • Recuerda que la tarjeta de crédito no es la extensión de tu sueldo, sino un apartado para emergencias o gastos necesarios imprevistos, de lo contrario nunca dejarás de gastar más de lo que ganas y vivirás en constante deuda y estrés mental. Cuida tu salud financiera para tener buena salud física.
  • Agradece a Dios cada mañana, respira profundo y bendice lo que tienes. Aprende a ser tolerante y en vez de juzgar aprende a sentir compasión con los que actúan de manera incorrecta, ya que su ser interior puede estar sufriendo las consecuencias en carne propia, ahora o en algún futuro.
  • Identifica cuando tengas un ego descontrolado y haz tu mayor esfuerzo por comprender que haría tu esencia espiritual en ese momento. Sigue tu intuición que ahí está la clave para ser asertivo, desde lo profundo de tu corazón.
  • Tómate tu tiempo para tomar decisiones, respira y déjalo un poco, luego retómalo y continúa. Aprende a meditar.

 

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